Nos vamos a fotografiar
el OTOÑO
a Las MERINDADES,
nos acompañas?
del sábado 6 al viernes 12 de octubre'18
... mira, mira
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Piedrahita, La Aldehuela y el Barco de Ávila...
unos días por el Alto Tormes - I
Antes de entrar en materia sobre estos encantadores parajes abulenses, queremos hacer una reflexión fotográfica, algo que haremos de vez en cuando, no en vano Photoperiplo va de eso: de viajar para fotografiar. También deciros que pronto pondremos en marcha nuestro Cuarto Oscuro ... Bueno ahí va nuestra primera reflexión:
Apostamos por descubrir los "no lugares" de Marc Augé que en su obra "Los no lugares, espacios del anonimato" decía:
"si un lugar puede definirse como lugar de identidad relacional e histórico, un espacio que no puede definirse ni como espacio de identidad ni como relacional ni como histórico, definirá un no lugar".
Entendemos así nosotros que los "no lugares" son esos espacios que median entre la partida y el destino, espacios esos que al turista le pasan por desapercibidos pero que a nosotros, viajeros fotógrafos, sí nos importan. En el camino muchas veces hemos encontrado nuestras mejores fotos, sin menosprecio del destino obviamente. Tal vez al fotografiar esos "no lugares" los humanicemos y ya serán "lugares" para ello sólo nos hace falta la luz y el tiempo, nuestro tiempo.
Mira estas tres fotografías, camino de nuestro destino, La Aldehuela (Ávila)... ya descubriremos dónde las encontramos, porque volveremos a esos "no lugares"...
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Camino de La Aldehuela (Ávila)
Sin prisa, continuamos nuestro camino convencidos de que hemos de volver para disfrutar de esos paisajes. En La Aldehuela (Ávila) teníamos nuestro destino; un pueblecito a caballo entre Piedrahita y El Barco de Ávila, situado en el valle del río Corneja afluente del fotogénico Tormes.
Allí en un de sus ¿anejos? lo que para nosotros es una pedanía (siempre aprendiendo) nos esperaban los amigos Chiqui y María con sus niños, Sergio y David, ya justa la hora para comer un buen cocido preparado por ellos, con legumbres, como no podría ser de otra manera, del Barco de Ávila.
Desde la misma N-110, al lado de la iglesia sale la carreterita que nos llevaría hasta el alojamiento en el que ibamos a pasar unos agradables días que en un principio programamos para fotografiar la que fue ausente nieve. Eso sí, donde había algo de nieve, en las alturas, era hielo... durante el día bien pero al ponerse el sol, fresquico, como decimos nosotros, no faltaba... hasta -9ºC ...
Al llegar, nada más ver la entrada a La Casa de la hija de Lalo, se nos antojó que iba a ser un encanto...y así lo fue... y calentita, con esas piedras y la calefacción, de maravilla.
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Partiendo de la aldea de La Lastra del Cano, anejo de Santiago de Tormes, es esta una ruta a pie, cómoda, de unas tres horas de duración entre la ida y la vuelta desde la que contemplaremos ambos valles, a la derecha en la dirección de la marcha el del río Corneja y a la izquierda el del Tormes, al pie del imponente macizo de Gredos. De frente, las estribaciones de la Sierra de Béjar con La Covatilla y el collado que da paso al vecino Valle del Jerte.
Mira, mira...qué vistas...
En Piedrahita, que en esta ocasión ibamos de paso pues merece visita aparte, nos dijo una señora que el pueblo más bonito para ella de toda la comarca y al que iba en bicicleta de joven, animándonos así por su cercanía, era Bonilla de La Sierra... y allá que fuimos.
Y no nos defraudó, están recuperando su muralla, complicado lo tienen... y nos llamó la atención la despoblación existente , así nos los dijo alguna vecina, calles enteras sin nadie viviendo, sobre todo en invierno... una lástima.
La escuela cerrada como tal, no había niños que asistieran, en su lugar un pequeño bar.
La impresionante Iglesia Colegiata de San Martín de Tours, cerrada, una lástima porque desde fuera se intuía grandiosa por dentro... nos gustaría fotografiar su luz interior... y su castillo, de propiedad privada, también nos dejó con los dientes largos... habrá que volver pero sobre seguro, lo intentaremos, merecerá la pena.
Neila de San Miguel y su torre de la iglesia, digna de ver... y fotografiar
Nos gusta madrugar, y así blanqueaba el valle con las espaldas de La Covatilla al fondo y los primeros rayos de sol, qué "fresquico" más bueno.
Llevábamos idea de subir a las pistas buscando la nieve pero como no había decidimos seguir el consejo de Chiqui y María, ellos habían visitado unos días antes de nuestra llegada, Neila de San Miguel.
Llegamos tan temprano, con apenas sol, que parecía que no estaban puestas las calles... nadie... silencio total; encima mira a poniente resguardado del levante por una sierra con lo que hasta que no levanta bien el sol ya se sabe...
Lo primero fue buscar la aconsejada torre...merecería la pena echar unas cuantas fotos con otros cielos y aire en movimiento, una delicia para jugar con las largas exposiciones diurnas o con iluminaciones nocturnas, bueno una pasada de escenario... o no?
Sin sol como se aprecia, con una luz fría, disfrutamos un ratito posando trípode a tierra. Dejamos el coche allí mismo y callejeando por el pueblo, solos, apenas unas gallinas, llegamos a la plaza donde comenzaban a entrar los primeros rayitos de sol y ¡¡¡sorpresa!!! una señora salió de su casa a nuestro paso al vernos con las cámaras y lo primero que nos preguntó fue si aquellas fotos iban a salir en internet porque ella veía internet...nos dejó más que asombrados dada su edad ¿80? pero más que por eso por su aseveración... claro que sí Maria Luisa, le contestamos... ahora le damos una tarjeta y la mantendremos informada, a lo que ella decidida nos pidió que le hiciéramos unas fotos para el internet y para enviarle unas copias si era posible, pues claro que sí María Luisa ... la primera promesa ahora mismo la cumplimos: aquí están sus fotos, querida María Luisa, en el internet...bien guapa!!!
Pinche en cualquiera de ellas y se hacen más grandes
María Luisa de Neila de San Miguel, una señora encantadora, antes de que saliera el sol...
María Luisa de Neila de San Miguel, una señora encantadora...
María Luisa de Neila de San Miguel, una señora encantadora...
María Luisa de Neila de San Miguel y Ana Mary, ni más guapas las dos...
Tras las sesión fotográfica y de un rato hablando con ella, María Luisa nos invitó a que fuéramos a ver el lavadero y unos impresionantes castaños de propiedad municipal que por medio de unos lotes eran explotados anualmente sus ingentes y erizados frutos para beneficio de los vecinos...
Para despedirnos de tan entrañable y fotogénico encuentro, nos arrimamos a un pastor que estaba echándole a sus terneros algo de pienso... y así quedó la cosa...
Ah! María Luisa, pronto le llegarán sus fotos a casa... en la nube ya están... muchas gracias por su atención!!!
Ya de vuelta para La Casa de La Hija de Lalo, parada obligada donde habíamos estado de noche fotografiando el río Tormes en El Barco de Ávila, esta vez aun de día y con un filtro de densidad neutra (Kenko ND 400)...
